La ciencia y la espiritualidad se encuentran más conectadas entre sí de lo que la mayoría de las personas estarían dispuestas a admitir

Una de las muchas diferencias que existen entre la Medicina Integrativa y la Medicina llamada Convencional, es el hecho de que en la primera se tiene en cuenta el aspecto espiritual de los seres humanos, mientras que en la segunda esto queda fuera del alcance y de la comprensión del modelo en el que se basan.

El enfoque convencional, el cual predomina en nuestra sociedad en general y en el campo de la salud en particular, establece una diferencia radical entre lo que son las disciplinas científicas y lo que es el ámbito de la espiritualidad.

Desde ese punto de vista, todo aquello relacionado con la salud y la enfermedad debe quedar comprendido dentro de los estudios y los conocimientos de las llamadas Ciencias de la Salud, mientras que lo concerniente a la espiritualidad ha de reservarse para quienes quieran seguir una vía de crecimiento interior.

Sin embargo, cuando nos acercamos al conocimiento de la realidad humana desde un punto de vista más global e integrador, nos damos cuenta de que ambas disciplinas no se encuentran tan separadas y desconectadas entre sí como cabría suponer, sino que más bien comparten importantes aspectos.

Tanto la ciencia como la espiritualidad no son más que dos formas diferentes de preguntarse y buscar respuestas acerca de la realidad última de las cosas, sobre todo, aquello que más le interesa al ser humano.

En los tiempos antiguos, ciencia y espiritualidad, caminaron de la mano. Modernamente, sobre todo desde el triunfo de la razón plasmado en la visión cartesiana de la realidad y los postulados de la física newtoniana, ambas se separaron de forma notoria.

En una comprensión verdaderamente integrativa, la práctica espiritual está directamente relacionada con una salud global

Pero modernamente, es a partir de las aportaciones científicas actuales, y sobre todo cuando atendemos a ese nuevo conjunto de conocimientos científicos que emergen en el campo de la física, la biología y la psicología transpersonal, entre otros, y que se conoce bajo el nombre de Nuevo Paradigma, comprobamos que de nuevo, ciencia y espiritualidad, comienzan a caminar juntas.

Todo este conjunto de nuevas y pequeñas revoluciones que los diferentes avances de los conocimientos científicos han venido aportando en los últimos años nos conducen a una naciente relación entre las ciencias, la espiritualidad y la salud.

Así, para todos aquellos que quieran aunar ciencia y espiritualidad con el objetivo de sanar globalmente, debemos comenzar preguntándonos algunas cuestiones que considero fundamentales, como por ejemplo ¿Qué es la espiritualidad? ¿Tiene relación con la salud? ¿Qué tipo de conexiones se establecen entre ambas? ¿De qué modo podemos favorecer una interacción adecuada para ayudarnos a sanar?

Según parece, la espiritualidad, es una capacidad humana universal y que no debe confundirse, necesariamente, con la práctica religiosa. Tiene que ver con el sentido del bienestar y con paz interior personal y global. Este concepto aparece en todas las culturas y está relacionado con la búsqueda de significados en la vida.

En los próximos artículos iré publicando nuevas ideas y reflexiones acerca de lo que se considera espiritualidad y algunos datos científicos que avalan la relación existente entre espiritualidad y salud.

Si te interesa el tema, espero que accedas a ellos en su momento y compartas tu propia opinión.