“Conocer nuestros límites es sumamente importante, pero hay algo todavía más importante aún, y es aprender a gestionarlos apropiadamente. Porque hemos de saber diferenciar entre los que nunca habremos de rebasar, aquellos otros que necesariamente tendremos que transgredir y los que nos sirven como indicación para descubrir por dónde hemos de seguir creciendo.” (ANF)