Tal como había quedado en otro artículo anterior, poco a poco iré comentando algunas de las «Enseñanzas del sentido común». La verdad es que son cosas evidentes, no hay grandes descubrimientos, pero a pesar de ello, podría sorprendernos más de la cuenta comprobar lo poco que se siguen.
NO ESPERES RECOGER LO FRUTOS QUE NO HAS SEMBRADO
Cada día nos sorprendemos ante noticias o experiencias de personas que se apropian de algo en lo que no tienen mérito alguno. En el mundo exterior sucede que muchos recogen lo que no siembran. Se benefician del esfuerzo de otros e incluso, en muchas ocasiones, se adjudican el trabajo que otras personas han realizado presentándolo como suyo. Seguro que algunos lectores han vivido alguna situación semejante.
Pero en el Mundo Interior nunca sucede eso, porque jamás cosecharás lo que no hayas sembrado. En este sentido las leyes que rigen la vida del Mundo Interior son de una justicia exquisita.
Sabemos que lo que no se planta no florece, por tanto, si quieres recoger paz, armonía y felicidad, de alguna manera habrás de sembrarlas en tu vida. Las semillas que siembres y cuides son las que brotarán. Aquello que no siembres o que descuides se perderá.
Es posible conectar y aprender de personas que te ayuden a sembrar las semillas del bienestar, porque, afortunadamente tenemos la suerte de encontrar expertos “plantadores de semillas” que nos proporcionan sus enseñanzas y su sabiduría. Cuando esto sucede, recae en cada uno de nosotros la responsabilidad de recogerlas, cuidarlas y mimarlas al máximo, como si de un tesoro se tratase, para que, llegado su tiempo, puedan florecer como se merecen.
Recuerda que las semillas del bienestar son de las posesiones más apreciadas que recibirás en tu vida, pero nadie podrá realizar por ti el trabajo que tú mismo debes llevar a cabo.