“Ser optimista no significa ver blanco lo negro, sino ser capaz de crear nuevas opciones a partir de cada acontecimiento, sabiendo qué puedes hacer algo ocurra lo que ocurra. Por eso un día soleado puede ser tan ilusionante y motivador como uno lluvioso, siempre que no te quedes atrapado en la queja de lo que no pudiste hacer y enfoques tu energía en disfrutar de las nuevas opciones que te ofrece la vida a cada instante” (ANF)