“Nuestros recuerdos en realidad no son los relatos históricos de los acontecimientos sucedidos, sino más bien interpretaciones articuladas desde la óptica del propio narrador. Así, cuando sientas que no te gusta uno de esos relatos que has construido, no renuncies, pues, al poder que tienes de ser capaz de transformarlo.” (ANF)
Nuestros recuerdos no son los relatos de los acontecimientos sucedidos, sino interpretaciones subjetivas y compensadas según nuestros parámetros familiares, sociales, culturales, religiosos etc… Cuando en una regresión vivencias de nuevo esos acontecimientos, estos suelen ser muy diferentes al recuerdo que habías creado de ellos, ahí es donde trabajamos para liberar toda la carga emocional negativa, facilitar la compresión y finalmente, generar la liberación.