El fundador de la Homeopatía

El fundador de la Homeopatía

 

Hahnemann

Samuel Hahnemann, creador de la homeopatía

Cristián Federico Samuel Hahnemann nació en Meissen, pequeña ciudad de Sajonia, Alemania, el 10 de Abril de 1755. Recibe todos estos nombres con un significado especial. Así, le llaman Cristián por Cristo; Federico por el rey y Samuel (Dios me ha oído) en señal de reconocimiento a Dios (1).

 

Su padre era pintor de porcelanas, pero la guerra de los siete años arruina la industria a la cual iba a ser destinado el pequeño Samuel. Así es retirado de la escuela y empleado en una tienda. Sigue leyendo

¿Qué pasa con los ataques a la homeopatía?

¿Qué pasa con los ataques a la homeopatía?

Ataques a la homeopatía

¿Qué pasa con los ataques a la homeopatía?

Hace un par de años, cuando una de mis hijas se encontraba estudiando bachiller, uno de sus profesores, aprovechando aquello de que el Pisuerga pasa por Valladolid, comenzó a arremeter contra la homeopatía con más visceralidad que acierto, según pude entender por el relato.

Coincidía que por aquellas fechas numerosos medios de comunicación expresaban, como si de una especie de canto coral se tratase, los mismos argumentos.  Sigue leyendo

Día Mundial de la Salud

dia mundial de la salud“Celebramos hoy el Día Mundial de la Salud, fecha que fue instituida como conmemoración de la fundación de la Organización Mundial de la Salud en el año 1948. Cada año se dedica a un problema sanitario concreto. Este año el tema escogido ha sido la hipertensión (HTA).

La hipertensión arterial (tensión alta) es conocida también como “el asesino silente” ya que de una manera callada e insidiosa va afectando al organismo, sobre todo a nivel vascular, de tal manera que cuando aparecen clínicamente los primeros síntomas es ya demasiado tarde para revertirlos.

La hipertensión se relaciona sobre todo con complicaciones a nivel cardiovascular, que pueden afectar a la vista, a los riñones, corazón o cerebro, entre otros
órganos. Si se asocia a otros factores de riesgo como la diabetes o la obesidad, se incrementa la posibilidad de una mayor y más precoz afectación del organismo. hipertensión

Según nos muestran las estadísticas la HTA, la padecen en el mundo uno de cada tres adultos, aumentando la proporción con la edad. Pero hemos de saber que es una patología sobre la que podemos actuar mediante acciones preventivas. Las más importantes son:

  • Mantener una dieta equilibrada, con abundante proporción de frutas y verduras
  • Moderar y disminuir la ingestión de sal
  • Evitar la ingestión excesiva de alcohol
  • Mantener un peso apropiado
  • Hacer ejercicio físico con regularidad
  • Evitar el consumo de tabaco

Desde el punto de vista de la Medicina Integrativa, además de los fármacos convencionales, disponemos de una serie de productos sencillos y fáciles de consumir que resultan de ayuda para el control de la HTA, como por ejemplo el ajo, condimento culinario que encontramos en la mayoría de nuestras cocinas, y que entre sus numerosas virtudes se encuentra la de mejorar la tensión arterial.

ajo-HTAEl magnesio, bien como suplemento o bien a través de los alimentos ricos en él, es también bastante útil para la HTA.

Plantas como el espino blanco, las hojas de olivo y la pasiflora (cuando existe un componente emocional) son también bastante útiles, así como ciertos suplementos como por ejemplo el Coenzima Q-10, resultan apropiados para estos casos.

Disponemos también de otros muchos tratamientos eficaces para el control de la HTA como la acupuntura, la homeopatía o el entrenamiento en técnicas de relajación, que se ha demostrado especialmente útil en las personas con un componente importante de somatización.

Más allá de este comentario sobre la HTA, el Día Mundial de la Salud, debiera estimularnos a reflexionar sobre los modos más adecuados para aplicar los cambios necesarios en orden a promover la salud en nuestras vidas y facilitar el mantenimiento de la misma en nuestros ambientes.» (ANF)

¿Cura la homeopatía?

¿Cura la homeopatía?

efecto placebo“Llevo más de veinticinco años practicando la homeopatía. He visto miles de pacientes que se han curado gracias a los tratamientos homeopáticos. Pero cada cierto tiempo salen en los medios de comunicación oleadas de detractores que argumentan que esas curaciones son «efecto placebo», ya que los homeópatas sólo aportamos, según ellos, agua, azúcar y buenas palabras. Vale, juguemos a que es así. Yo tengo mis casos documentados. A todos los que piensan eso los reto públicamente a que las próximas anginas, neumonías, bronquitis, úlceras, hipotiroidismo, cistitis, parasitosis, migrañas, lumbalgias, abscesos, etc. los tratéis sólo con “agua, azúcar y buenas palabras.” Como pienso que no soy mejor médico que aquellos compañeros detractores de la homeopatía, seguro que son capaces de alcanzar los mismos resultados que yo, y, además, evitarán así efectos secundarios al paciente y un gran ahorro en costes sanitarios a nuestro país. Os animo a que lo hagáis. ¿Os vais a atrever? ¿Seríais capaces de hacerlo obteniendo los mismos resultados “placebo” que yo he obtenido?» (ANF)