Terapia integral

Terapia integral

interacicón cuerpo-mente“Hace unos días me decía un paciente hipertenso, “a mí me sube la tensión cuando tengo problemas”. Ayer me decía un paciente diabético “he comprobado que el azúcar se me dispara cuando estoy nervioso”. Son solamente un par de ejemplos sacados de los muchos pacientes que describen cosas similares.

Hoy día nadie duda de la estrecha interrelación existente entre nuestros estados emocionales y los diferentes parámetros de salud biológica. Es decir, la mente y el cuerpo forman una realidad inseparable en la que mediante diversos mecanismos neurológicos, energéticos y hormonales se influyen mutuamente.

Pero esta obviedad, constatada actualmente por numerosos estudios científicos que la avalan, no se traduce luego a nivel práctico en la clínica diaria a través de prescripciones consecuentes a la hora de aplicar una terapéutica apropiada para estos casos.

Quiero decir que para la mayoría de los médicos, aunque conozcan y admitan esta interrelación cuerpo-consciencia, los conocimientos anteriores no se trasladarán a algo concreto, sino que, finalmente, acabarán recetando sólo unas pastillas para la tensión o unas pastillas para el azúcar, por ejemplo, sin tener en cuenta el modo en el que el aspecto emocional influye en estos parámetros.

A lo sumo, habrá alguno que prescribirá tranquilizantes, si es que observa que el paciente se encuentra especialmente nervioso o demasiado estresado. En pocos casos se le planteará la posibilidad de enfocar el tratamiento a un nivel más profundo, es decir, hacer algo que le ayude a disminuir el impacto que la somatización emocional produce en su cuerpo.

En caso de que se decidiera comenzar a tratar la dimensión emocional, para intentar mejorar las posibles somatizaciones, pocas cosas hay para ello más efectivas que aprender a gestionar dichas emociones de una forma apropiada. Pero ¿cómo hacerlo?

Lo primero que deberíamos tener claro es que se trata de un proceso de aprendizaje, y como tal requiere unas condiciones de tiempo, esfuerzo y disciplina por parte del alumno. Las recetas fáciles y rápidas no suelen ser efectivas. He de decir que me gustaría que lo fuesen, pero después de más treinta años de experiencia, he constatado que no funcionan las recetas mágicas, pero sin embargo sí son especialmente útiles aquellos aprendizajes que nos llevan a conocernos mejor y que incrementan el nivel de recursos y habilidades de  cada sujeto para hacer frente a la gestión adecuada de su mundo emocional.

Muchos pacientes ya lo han hecho, y con ello han conseguido regularizar sus parámetros biológicos, disminuir la dosis de su medicación convencional y, sobre todo, mejorar su calidad vida.

Sería deseable que el conocimiento que hoy día poseemos acerca del modo en el que el cuerpo y la mente se influyen mutuamente, diera lugar a una visión mucho más amplia, certera y ajustada a dicha realidad, a la hora de realizar las prescripciones para cada caso” (ANF)

La sal de la vida

La sal de la vida

la salPor Dª Gracia María Casado, Nutricionista y colaboradora del CMI Dr. Nougués La sal es esencial para la vida ya que no podemos vivir sin ella. Sin embargo, uno de los consejos nutricionales que más se repiten es que debemos reducir el consumo de sal porque su consumo elevado es peligroso para la tensión y para la salud de nuestro corazón ¿Cómo explicar esta paradoja? Pues sencillamente porque la sal de mesa que utiliza la gran mayoría de la gente en sus casas y que se encuentra en casi cualquier producto procesado, empaquetado o enlatado tiene muy poco que ver con la sal cristalina natural. La sal de mesa es aproximadamente 97,5% de cloruro sódico y un 2.5% de distintas sustancias químicas para impedir que se apelmace, algunas de ellas tóxicas como puede ser el aluminio (también se le puede añadir yodo y tendríamos la sal yodada). Además esta sal, durante el proceso de secado, se le somete a temperaturas de 650ºC lo que produce importantes cambios en su estructura química. La sal cristalina natural, tanto la que procede del mar como de las montañas, contiene todos los elementos (más de 80) que componen el organismo humano en las proporciones adecuadas, colaborando en la regulación del equilibrio hídrico y no saturando los sistemas de eliminación. En el mercado hay diferentes tipos de sales naturales. Las más conocidas son las siguientes:

  • Sal marina sin refinar: se obtiene mediante      evaporación del agua del mar en las salinas. Tiene un sabor ligeramente      más consistente que la refinada por lo que se usa una cantidad menor.
  • Sal guerande o sal gris: sal marina procedente de la Bretaña Francesa;      de color gris y tamaño medio. Se la considera sal integral pues es natural      y sin aditivos, rica en oligoelementos.
  • Sal rosa del Himalaya: es una sal de roca de gran      pureza. Su color rosado se debe al contenido en hierro, y tiene un sabor      fuerte y ligeramente amargo

Todas ellas se pueden encontrar en las herboristerías. Por lo tanto, cuidemos la ingesta de sal, pero sobre todo la obtenida de forma industrial.

Protegerse del ruido

Protegerse del ruido

protegerse del ruído“Según muestran los datos, vivimos en una sociedad, la española, que es la segunda más ruidosa del mundo. Desde el punto de vista de la salud esto no resulta nada beneficioso, como tampoco lo es para la calidad de vida, pues son muchos los estudios que confirman las repercusiones negativas que produce en el organismo el exceso de ruido.

Padecemos en muchas de nuestras ciudades un exceso de contaminación acústica que supera en ciertos lugares el límite máximo admitido por la OMS, que es de 65 decibelios. Se admite, también, que en nuestras ciudades el 80% de la población padecen una cierta forma de sordera ligada a la contaminación acústica. Además se han realizado estudios que demuestran que los jóvenes entre 15 y 25 años, en su mayoría tienen afectada la integridad de su capacidad auditiva.

El transporte, la construcción y la industria suelen ser los principales responsables de dicha contaminación, aunque en ciertos lugares aparecen otros elementos generadores de ruido como son los bares nocturnos o determinadas actividades relacionadas con el ocio en las que se concentran un número muy elevado de personas.

Muchas de los trastornos producidos por la contaminación acústica están relacionados con la esfera psicológica, como el insomnio, trastornos de la atención, de la memoria, ansiedad o exceso de irritabilidad, pero otras afectan a otros órganos y sistemas como es el caso de la tensión arterial, las contracturas musculares y los procesos digestivos entre otros.

Paras luchar contra el ruido es fundamental la concienciación ciudadana y la toma de medidas efectivas por parte de la administración correspondiente, situando vallas de protección acústica, utilizando materiales aislantes sonoros en las construcciones o regulando la intensidad o los horarios de actividades acústicamente contaminante.

Por nuestra parte, podemos aportar nuestro granito de arena tratando de ser un poco menos ruidosos, evitando poner música, televisión, etc. a un volumen excesivamente elevado y buscando momentos de silencio y de contacto con la naturaleza, cuyos sonidos ejercen un efecto relajante y sedante sobre el organismo” (ANF)

Artritis reumatoide

Artritis reumatoide

artritis reumatoide“La Artritis Reumatoide (AR) es una enfermedad inflamatoria crónica que se manifiesta en todo el cuerpo pero que afecta principalmente a las membranas sinoviales y articulares. Afecta aproximadamente a un 1% de la población triplicando el número de mujeres respecto a los hombres. Puede afectar a diversas articulaciones, aunque las más frecuentes son las manos, pies, muñecas y tobillos y su progresión puede llevar a deformidades articulares. El mecanismo por el que se producen estas alteraciones se debe a un proceso autoinmune, es decir, son las propias defensas del organismo las que atacan a los tejidos sanos afectándolo, incluso llegando a destruirlos.

La medicina convencional ha utilizado para su tratamiento diversos remedios como las sales de oro, aunque actualmente utiliza sobre todo los antiinflamatorios, los corticoides y los inmunosupresores (como el methotrexato). Actualmente se están empleando también los anticuerpos monoclonales y otros agentes biológicos para tratar de frenar esta enfermedad degenerativa.

Desde el punto de vista de la Medicina Integrativa, otros factores han de ser tenidos en cuenta.

La dieta adecuada, como siempre, es bastante importante. Sabemos que una alimentación con predominio de alimentos crudos, frutas, verduras y fibra con un buen aporte de ácidos grasos poliinsaturados, juegan un papel fundamental. Se han hecho estudios que demuestran la importancia de una alimentación vegetariana en pacientes con esta problemática. Es importante también el aporte de algunas substancias antioxidantes como la vitamina C.

Es interesante, además, el uso de MSM, gran aportador de azufre y detoxificador hepático que ha demostrado una disminución de la sensibilidad al dolor.

Existen estudios que constatan la utilidad de aportes de EPA (Ácido eicosopentanioco) y de otras substancias como el Condroitin sulfato y la Glucosamina.

Otros factores a tener en cuenta son el estado de la flora microbiana del intestino, la cual habrá que cuidar, así como la detección y eliminación de las alergias e intolerancias alimentarias, para las cuales ciertos métodos como la Biorresonancia están especialmente indicados.

Entre las plantas medicinales que pueden ser útiles para estos enfermos tenemos la Cúrcuma, que posee importantes efectos antioxidantes y antiinflamatorios; el Jengibre, que inhibe la síntesis de substancias proinflamatorias que son responsables de ciertos fenómenos articulares; la Raíz de Bupleuri, planta china que se utiliza en algunas fórmulas magistrales para el tratamiento de esta enfermedad; el famoso Harpagofito con un  importantísimo efecto a nivel articular o la Boswelia, así como un largo etc. de plantas coadyuvantes tales como la ulmaria, fresno, regaliz, etc.

También se están utilizando los enzimas proteolíticos como la Bromelaina, para tratar no sólo el componente inflamatorio en fase aguda sino también los efectos crónicos de esta patología.

Terapias físicas como los masajes, la movilización cuidadosa de las articulaciones afectadas, y otras ayudas terapéuticas como la Psicoterapia de apoyo, pueden ser también importantes herramientas a tener en cuenta.” (ANF)

Superar la ansiedad

Superar la ansiedad

ansiedad“Los cuadros de ansiedad son unos de los problemas que frecuentemente afectan a la población en general y que suele estar asociada al estilo de vida de sociedades como la nuestra. Hablamos de ansiedad para referirnos a una respuesta emocional de carácter displacentero que engloba tanto aspectos subjetivos o mentales como otros de tipo fisiológicos o corporales, y que son debidos a un estado de elevada activación de los sistemas adaptativos del organismo. Se define también como un estado de miedo, alarma o preocupación, que pueden estar relacionadas con un desencadenante conocido o desconocido. Fisiológicamente, las estructuras más implicadas en la respuesta de ansiedad es el eje Hipotálamo-hipofisario, el cual produce una activación adrenérgica del organismo, si bien existen además otros sistemas secundarios asociados a esta respuesta, como son el sistema dopaminérgico, la amigdala y el hipocampo. Las personas proclives a padecer ansiedad suelen mostrar un “sesgo atencional interpretativo”, lo cual quiere decir que poseen una mayor tendencia a atender a los estímulos amenazantes que a los tranquilizadores, y también tienden a interpretar señales ambiguas como si fuesen amenazantes. Desde el punto de vista de la Medicina Integrativa se utilizan distintos tipos de terapias a la hora de abordar este complejo problema. En casos extremos de crisis de pánico pueden resultar necesario utilizar un fármaco convencional del tipo de las benzodiacepinas, si bien lo más conveniente es tratar de utilizarlos lo menos posible. Uno de los aspectos que normalmente no suele tenerse en cuenta desde el enfoque médico convencional es la alimentación. Sin embargo, realizar una detoxificación a nivel hepático activando el citocromo P450, permitirá una mejor metabolización de las substancias que se generan por el exceso de activación del sistema nervioso vegetativo. Hacer curas de depurativas cada 3-4 meses es una forma de ayudar al organismo. Los suplementos de vitaminas B6 y B12 se han demostrado también de utilidad, así como el Inositol, considerado como la benzodiacepina natural la acción calmante que posee. El 5-HTP se ha demostrado útil para prevenir los ataques de pánico, pero hay que considerar su utilización cuando la personas toma al mismo tiempo psicofármacos convencionales. El magnesio es un mineral que habrá de ser aportado de forma sistemática en estos casos, pues ayuda  ala relajación los músculos y del sistema nervioso y ayuda a reducir la ansiedad diurna y mejora el sueño bocturno. Respecto a la fitoterapia, se han utilizado con frecuencia plantas como la pasiflora, la valeriana, la melisa, el espino blanco, etc. Otras substancias útiles para tratar este asunto son la taurina, la tirosina, el GABA (acido gamma amino butírico), así como diferentes remedios homeopáticos y Elixires Florales. Otras terapias útiles son la Acupuntura, la Auriculoterapia, la Reflexología Podal o la Craneopuntura de Yamamoto, entre otras. La persona ha de tener presente que una cosa es tratar la ansiedad en un momento dado otra bien distinta es el tratamiento de fondo. Para esto último el paciente habrá de aprender una serie de herramientas y estrategias que le ayuden a cambiar su manera de reaccionar ante los diferentes estímulos, es decir,  aprender a enfocar su vida de un modo diferente y a tomarse las cosas de un modo distinto, por lo cual el entrenamiento en sistemas tales como la Sofrodynamia® será de gran interés.” (ANF)

Cuidados para el acné

Cuidados para el acné

acné“El acné es un proceso inflamatorio del folículo sebáceo que afecta en mayor medida a los adolescentes, aunque también puede aparecer en otras edades. Hay factores de tipo genético y otros ambientales que lo agravan o desencadenan, como es la ingestión de ciertos alimentos, el estrés o  determinadas alteraciones hormonales.

En las lesiones acnéicas  aparecen una proliferación de los queratinocitos de la piel, asociada a la proliferación de una bacteria, Propionibacterium acnes, que da lugar a procesos de tipo inflamatorio en el folículo.

A veces, el acné, se puede sobreinfectar dando lugar a lesiones que si no se tratan adecuadamente podrían dejar secuelas estéticas.

Para abordar de manera adecuada este trastorno de la piel, hemos de basarnos en una alimentación apropiada, rica en frutas, verduras, cereales, y con restricción de ciertos alimentos como grasas, picantes, chocolates, dulces, pastelería y alcohol. Es aconsejable que la dieta contenga un mayor aporte proteico (por encima del 35% de las calorías totales) ya que el exceso de hidratos de carbono podría empeorarlo.

Algunos estudios han señalado la reducción de las lesiones acnéicas asociadas a un elevado consumo de pescado, lo cual explica la importancia que tiene para la piel el aporte de una cierta cantidad de ácidos grasos de la serie omega-3. Cuando no se obtienen a través de la dieta es conveniente suplementarlos.

También se ha encontrado cierta relación entre el acné y niveles altos de oxidación, por lo que ciertos productos antioxidantes como la vitamina A, E, té verde y cúrcuma, podrían aportar un interesante efecto protector.

Otras investigaciones demuestran que en los pacientes con acné, aparecen niveles bajos de ciertos oligoelementos tales como el selenio, el zinc y el cromo. También mejora por el aporte de ciertas vitaminas como la B6 (en el caso de acné relacionado con la regla) y la B3, cuyo aporte mejora el aspecto inflamatorio de las lesiones.

Otros productos interesantes para el tratamiento local de las pieles acnéicas son el Aceite del árbol del Té y las mascarillas de arcilla, aunque con esto último hay que cuidar que nos e reseque la piel excesivamente. Los baños de mar y el sol tomado con precaución pueden ayudar a mejorar las lesiones acnéicas” (ANF)

Salud cardiovascular

Salud cardiovascular

sistema circulatorio“El corazón es una víscera a la que además de la función circulatoria en la que funciona como una bomba aspirante-impelente, se le atribuye también una significación netamente emocional. Metafóricamente es el órgano del amor, y en Medicina Tradicional China se piensa que es la residencia del Shen o consciencia.

Anatómicamente es una estructura muscular dotada de varias válvulas que regulan el flujo sanguíneo entre sus distintas cavidades y un sistema eléctrico de excitoconducción encargado de regular el ritmo de sus latidos.

El estado de salud del sistema cardiovascular, corazón y los vasos sanguíneos, influye directamente sobre la salud general del organismo, ya que va a estar relacionado con el ritmo de envejecimiento de los demás órganos de nuestro cuerpo, ya que es el sistema cardiovascular el encargado de aportar el oxígeno y los nutrientes s a todas las demás vísceras y tejidos de nuestro corporalidad.

El envejecimiento de corazón y los vasos sanguíneos se produce debido a factores genéticos y también en parte a otros relacionados con el estilo de vida. 

Dicho envejecimiento produce que los vasos sanguíneos se hagan más estrechos y rígidos, y que el corazón disminuya su contractilidad y elasticidad, con o cual se pierde eficacia y se aportará un menor volumen sanguíneo a los demás órganos. 

Se calcula que a los 65 años hemos perdido entre el 30-40% de la capacidad aeróbica comparado con un adulto joven.

Para mantener un sistema cardiovascular en el mejor estado de salud posible, los factores que hemos de tener en cuenta respecto a nuestro estilo de vida son: 

  • Ejercicio moderado y continuo 
  • Control del estrés emocional y practicar relajación
  • No fumar
  • Procurar un buen descanso nocturno
  • Mantenerse en el peso adecuado
  • Alimentación apropiada 
  • Control del colesterol y los triglicéridos
  • Controlar la tensión arterial
  • Moderar el consumo de sal” (ANF)

 

Cuidar los huesos

Cuidar los huesos

cuidar los huesos“El aparato locomotor está formado por huesos, músculos y articulaciones junto a todo el componente ligamentario y tendinoso, los cuales conforman una unidad funciona cuya finalidad es mantener la postura y proporcionar movimiento a nuestro cuerpo. Los huesos constituyen la parte más dura, y además de ser el armazón sobre el que se construye la forma corporal, aportan además protección a ciertos órganos delicados como es el caso del cerebro y los pulmones. Los huesos son estructuras vitales en continua remodelación. la velocidad con la que estos procesos se desarrollan se van modificando con el paso de los años, de tal manera que a partir de cierta edad se destruye más hueso que el que se construye, lo cual hace que aparezcan patologías como la osteoporosis, con pérdida de la masa ósea. Se dice que un sujeto joven remodela completamente su esqueleto cada siete años, pero no envejecen a la misma velocidad el hueso de la mujer que el del hombre. Cada década una mujer pierde un 8% de masa ósea total, mientras que un hombre suele perder en torno a un 3%. Si realizamos los cálculos a lo largo de la vida, la pérdida de densidad mineral total es de un 30% para las mujeres y un 15% para los hombres. Dichas pérdidas comienzan en torno a los 30 años, pero se aceleran en caso de la menopausia y en situaciones de ciertas enfermedades o reposo prolongado. Hay en estos casos un aumento de la fragilidad y una disminución de su resistencia. Para mantener una salud ósea que contrarreste el proceso normal de envejecimiento se recomienda la realización de ejercicio regular y continuado durante toda la vida junto con una nutrición adecuada. La mayoría de las personas tienen claro que han de aportar un nivel apropiado de calcio apropiado en su dieta para nutrir los huesos, pero olvidan la presencia de otros minerales sin los cuales el calcio no puede cumplir su función. Los más importantes son el magnesio, el fósforo, el azufre y el silicio, y en menor cantidad encontramos otros como el boro. En una alimentación normal solemos tener asegurado el aporte de azufre y tampoco suele haber problemas con el fósforo, pero no tanto el de magnesio y bastante menos el de silicio, por lo que a partir de cierta edad, aportar suplementos de magnesio y silicio pueden ser bastante conveniente. Un error importante es pensar que el calcio en la dieta de un adulto ha de venir vehiculado por la leche y los lácteos. Nada más erróneo. Ningún mamífero lo hace y no se descalcifican. Es importante que el aporte de calcio se realice a través de alimentos que aporten un calcio bioasimilable en las cantidades apropiadas. En caso de que esto, por las razones que sea, no se pueda llevar a cabo a través de la dieta, es entonces cuando están indicado los suplementos.” (ANF)

Antioxidantes y alimentación

Antioxidantes y alimentación

alimentos antioxidantesCada vez más frecuentemente llama nuestra atención el mundo de los antioxidantes. Hoy día, dicho término, ha conseguido penetrar en la población de tal manera que, aunque uno no posea la más mínima noción de química básica, la palabra “antioxidante” suele sonar a algo bueno, algo que hay que tomar, sobre todo a ciertas edades o que hay que ponerse en la piel para retardar el proceso natural de envejecimiento cutáneo.

Y, podría decirse que no les falta algo de razón en esas afirmaciones, pero también es conveniente aprender a separar el trigo de la paja, es decir, ser capaz de discernir entre lo que son las realidades científicas más o menos constatadas y la presión mediática de ciertos laboratorios en los que la mayoría de las veces su objetivo es conseguir los máximos beneficios expresados en una buena cuenta de resultados a final de cada ejercicio contable, más que la salud como tal. Por eso soy partidario de tomar nuestros antioxidantes a través de la alimentación y suplementar cuando sea necesario con ciertos productos de garantía y calidad. Sigue leyendo

La palabra curativa

La palabra curativa

la palabra curativa“De cuando en cuando vuelvo a retomar el tema de la importancia que tienen nuestras palabras, no sólo en el ámbito de la comunicación interpersonal sino también sobre la capacidad de intervenir en la salud de una manera activa, unas veces fomentando procesos curativos y otras entorpeciéndolos o, incluso, generando un daño.

Siempre he considerado que a los estudios convencionales de medicina en las facultades de nuestro país les faltan muchas materias importantes, al tiempo que le sobran algunos otros contenidos que poco o nada aportan a la práctica médica diaria. Al menos a mí nunca me enseñaron una buena base de dietética práctica, la tuve que aprender luego; ni me hablaron de diferentes enfoques médicos en el ámbito de las medicinas complementarias, también los estudié por mi cuenta; ni tampoco me explicaron la forma de hacer que el propio acto médico fuese curativo en sí mismo, ni el efecto que tiene lo que decimos los médicos sobre los pacientes, también tuve que aplicarme en aprender sobre ello una vez finalicé la carrera.

Gregori Bateson hablaba del “médico genosaludable”, para referirse a los profesionales que son generadores de salud, no ya por la prescripción medicamentosa o por su buena técnica quirúrgica, sino por su mera presencia y su impecable forma de interactuar con los pacientes.

Sin los profesionales de la medicina nos convirtiéramos en personas “genosaludables”, como decía Bateson, sería lo mismo que admitir que es posible que la curación comience en el mismo momento de la consulta médica. Nos habríamos convertido, pues, en “personas medicina”.

Pero para ello se hace imprescindible decir adiós a la mayoría de los discursos médicos habituales, ya que muchos compañeros no han entendido todavía que promover la salud es distinto de evitar la enfermedad (muchas personas son incapaces de reconocer la diferencia).

Con frecuencia escucho el relato de pacientes que refieren cómo han salido asustados, preocupados o, incluso, emocionalmente chocados, tras una consulta médica en la que la comunicación se enfoca en términos de riesgos, peligros y posibilidades de desenlaces infaustos. Piensio que cada paciente debería salir del consultorio algo mejor de como entró.

En ningún caso digo que haya que ocultar información, decir que lo negro es blanco, ni falsear los datos evidentes. Quienes me conocen saben lo poco partidario que soy de «dorar la píldora». El asunto es otro bien distinto. Más bien se trata de tomar consciencia de la importancia del «arte de comunicar», porque ¿de cuántas manera diferentes se puede dar una mala noticia? Seguro que descubrimos que hay formas que nos hunden más y otras que, diciendo el mismo contenido, hacen que nos sintamos esperanzados.

Si los médicos fuésemos conscientes del terrible daño que produce en el sistema inmunológico ciertas emociones como el miedo, o los bloqueos a la curación que aparecen por un estado emocional alterado, nos ahorraríamos muchos problemas y también los pacientes se ahorrarían algunos malos ratos.

Soy de la opinión que ayudamos más al paciente generando una actitud positiva que metiéndole miedo para conseguir que haga algo. También soy de la opinión que la palabra dicha por el médico ha de ser usada como «la primera medicina», que no por ser más sutil e inmaterial es menos poderosa que otras.

Así que, entre las muchas tareas que propongo mejorar es la ser cada vez más «genosaludable» y utilizar cada día mejor «la palabra curativa» para promover el proceso de sanación» (ANF)