Mente vieja y mente nueva

Mente vieja y mente nueva

menta vieja y mente nuevaTodos nosotros, lo sepamos o no, hemos realizados muchos cambios a lo largo de nuestras vidas. Algunos de ellos han sido conscientes, otros, en cambio, no. A estos últimos los llamamos “cambios ciegos”, y se caracterizan porque, en estos casos, nos encontramos imposibilitados para poder programarlos convenientemente en la dirección adecuada, simplemente ocurren.

Pero para alguien que quiera desarrollar su potencial, para alguien que decida poner toda la carne en el asador en lo que se refiere a crecer como ser humano, es necesario realizar los cambios de forma voluntaria, libre y programada.

Sea como fuere, lo que parece evidente es que no podemos sustraernos a los procesos de cambio en la vida, aunque no nos demos cuenta de ello.

Para los seres humanos, uno de los cambios más importante que podamos llevar a cabo es el que se produce cuando elegimos involucrarnos en un proceso de autorrealización.

Esto significa que decidimos transformar nuestra mente desde un estado limitado hacia otro más puro, armónico y feliz, algo totalmente imprescindible para cualquier persona que anhele vivir mejor. Podríamos describir este proceso como el cambio de la “mente vieja” a la “mente nueva”.

Hemos leído que en la simbología cristiana existe una metáfora similar, la del paso de “hombre viejo”, que viene representado por Adán, al “hombre nuevo”, que se refiere a los nacidos en Cristo mediante el Bautismo.

Este mismo fenómeno de transformación de la mente hacia un estado más puro se encuentra, también, simbolizado y representado de forma parecida en otras tradiciones espirituales, y siempre aparece ligado a ritos de muerte y renacimiento: morir a lo viejo y nacer a lo nuevo.

Así, el paso de “la mente vieja” a la “mente nueva”, ha de significar una especie de muerte simbólica, de renuncia a lo que nos sobra y limita, para dar lugar al nacimiento de aquello que nos desarrolla.

Por tanto, no podemos perder de vista que en dicha transformación será necesario un esfuerzo. Cambiar voluntariamente hacia las metas elegidas es algo que cuesta, al igual que también cuesta todo aquello que tiene un cierto valor en la vida.

Así que deberíamos prestar especial atención al hecho de que en todo cambio hay pérdidas, y que si eso no se tiene en cuenta o las pasamos por alto, pueden dificultar la transformación hacia el nuevo estado.

El paso, pues, de tener “mentes viejas” a tener “mentes nuevas”, lleva implícito el dolor de la pérdida de lo antiguo, y también la dificultad del “parto” hacia lo que ha de nacer.

Pero dichas dificultades se soslayan cuando nos damos cuenta de que, al mismo tiempo, nuestra transformación interior contiene implícitamente la alegría que emerge de forma espontánea cuando realizamos nuestra verdadera naturaleza y nos liberamos de nuestros miedos, incertidumbres y antiguas limitaciones.

Para Francesco Alberoni, sociólogo italiano,  este tipo de cambio es denominado “estado naciente”, a propósito del cual dice: “no es un modo de ser estable, duradero, sino como un nacimiento, un despertar, un descubrimiento de que lo posible se abre ante nosotros”.

Este estado naciente de Alberoni, que equivale a la concepción de nuestra “mente nueva”, se produce cuando rompemos las barreras de aquello que nos sujeta, los convencionalismos, las culpas, los miedos y emergemos a un estado del ser mucho más pacífico, sereno y amoroso.

Pero no olvides que todo tiene un coste, y quizás debieras preguntarte ¿cuál es tu elección, si mantenerte en el “dulce sueño de la mente vieja” o decidir correr el riesgo de nacer en la luz?

Editorial de febrero 2014

Editorial de febrero 2014

Editoral febrero-14Dejamos atrás un mes, enero, que además de frío, nieve, lluvia y cuadros catarrales y gripales, nos ha traído también algunos datos esperanzadores sobre una supuesta recuperación de la economía.

La prima de riesgo se estabiliza a la baja, el último trimestre del año se cierra en positivo, el turismo alcanza niveles históricos, los datos de la Encuesta de Población Activa parecen marcar un cambio de tendencia, incluso se escuchan voces que nos hablan del comienzo de la salida de la crisis.

Sin embargo, hay algo que no me cuadra. Porque con todos esos buenos datos, que lo son, los trabajadores siguen ganando menos, pagando más impuestos, nos suben la electricidad, el agua y no sé cuántas cosas más… y entonces me pregunto ¿recuperación para quién?

¡Ah, sí!, no me acordaba que hace poco el señor Botín les comunicó a sus accionistas del Banco de Santander que había duplicado sus beneficios en el 2013 (año éste de crisis por cierto, ¿pero de crisis para quién?). El montante asciende a unos 4.370 milloncillos de euros de nada. ¡La de cosas que se podrían arreglar sólo con esos “beneficios de más”!

En fin, ya saben ustedes que tengo pocos conocimientos de economía y por eso tal vez no llegue a comprender ciertas cosas muy profundas, pero hasta donde mi mente alcanza, la cosa queda como sigue: cuando falta dinero pagamos nosotros, pero cuando sobra se lo llevan otros.

En este punto me viene a la memoria unas coplas de Baguala que cantaba el mítico grupo Quilapayún, que más o menos decía así en una de sus estrofas:

 

Si no protesto me explotan

y si protesto voy preso,

pa’ los de abajo la caja

y pa’ los de arriba el queso.

 

Claro que eso se lo oíamos cantar allá por los años setenta. Y cuando lo escuchábamos pensábamos entonces que esa especie de “canción protesta” se refería a Chile de Pinochet, a la Argentina de Videla o a la España de Franco. Lo que no podíamos imaginar por entonces es que estas estrofas, cuarenta años después, y de más de treinta y cinco años de democracia, pudieran seguir siendo vigentes en la España actual.

Pero ahora toca centrarse en reflexionar sobre aquello que nos traerá el nuevo mes que comienza, febrero.

Conocido como “el loco” por sus inesperados y bruscos cambios de tiempo, unas veces hace honor a su nombre y otras en cambio no, y transcurre como una especie de preludio de la primavera. A ver como se presenta este año.

A nivel sanitario, los medios de comunicación han insistido en un posible repunte respecto al número de casos de cuadros gripales en este mes, alertando o, mejor dicho, alarmando, sobre los efectos de la misma.

Sin embargo, cuando recurrimos a los datos epidemiológicos oficiales y los comparamos con las estadísticas anuales, nos encontramos que la incidencia es menor o igual a la de años anteriores. Entonces, ¿a qué viene tanta alarma se preguntará alguno?  Pues eso mismo me pregunto yo.

¿Acaso normalmente salen cada día en las portadas de prensa o en las noticias de radio y televisión las personas que mueren o están en la UCI por un accidente vascular cerebral o por cualquier otra enfermedad?, la respuesta es sencilla, ¡no! Entonces, ¿por qué sale en la primera página de los periódicos y abriendo los informativos nacionales, esos mismos datos referidos a la gripe? Esto no hace mas que generar miedo y alarma en la población.

Pues posiblemente por una sencilla razón. Porque hay una vacuna que vender y muchas dosis osemtalvir (Tamiflu®) almacenadas que habrá que gastar, ¿no?, las cuales se compraron cuando lo de la tomadura de pelo de la famosa pandemia de Gripe A del 2010.

Con esto no estoy quitando importancia a la posible gravedad de muchos cuadros, ni tampoco negando la aparición de casos mortales. Lo único que digo es que son los mismos que en cualquier otro año normal, como afirmaba en una entrevista al diario Sur la Jefa de Salud de la Delegación Provincial de Málaga. Y repito, entonces ¿a qué tanta alarma?

Tengo una hipótesis. La patente del osemtalvir (Tamiflu®), producto que se recomienda para tratar la gripe A, le caduca al laboratorio Roche en el 2016. Eso quiere decir que a partir de esa fecha otros laboratorios podrían fabricarlo, abaratar el precio y competir en el mercado en la venta de ese producto, medicamento, por cierto, de más que dudosa eficacia.

Por tanto, de aquí a esa fecha, es decir, este año y los dos que vienen, intuyo que nos van a intentar asustar  por todos los medios para que se consuma más. Porque ya se sabe, una buena dosis de miedo hacia una enfermedad es un fantástico medio para incrementar la venta de ciertos productos.

Creo que además de protegerse de las enfermedades tendríamos que plantearnos promocionar la salud. Parece lo mismo pero no lo es.

Desde mi punto de vista, es muy importante cuidar la alimentación incrementando la cantidad de frutas, verduras y alimentos ricos en productos antioxidantes. Realizar ejercicio físico moderado, cuidar nuestros ciclos de descanso y mantener una actitud mental positiva. Éstas son herramientas especialmente útiles para mantener un buen nivel de salud.

En los momentos de mayor incidencia de patologías virales es bastante aconsejable tomar ciertos productos que incrementan la eficacia de nuestro sistema inmunitario frente a ellos.

Existen productos de alta calidad para ayudarnos a mantener una buena salud en el ámbito de la fitoterapia, de los oligoelementos, de la micoterapia y también conocidos medicamentos homeopáticos que han mostrado su eficacia en miles de pacientes en la prevención y el tratamiento de cuadros virales.

Por tanto, tenemos más herramientas de las que a veces pensamos para mejorar nuestras defensas y mantener un buen estado de salud.

Un conocido estudio demostró que el miedo bloquea el sistema inmunitario. A unos estudiantes se les proyectó una película de risa, mientras que a otros les pusieron una de miedo. Después se midieron los niveles de IgA, que es la inmunoglobulina que se encuentra en las secreciones y las mucosas, y que nos protegen contra las agresiones que padecemos por vía respiratoria o digestiva, antes de que penetren a la sangre. Los que vieron la película de risa incrementaron sus niveles, mientras que quienes vieron la de miedo lo disminuyeron.

Por tanto, no deberíamos olvidar el hecho comprobado de que el miedo debilita nuestras defensas y nos hacen más susceptibles de padecer ciertas patologías, mientras que reír y disfrutar de la vida nos hace más resistentes.

Así, quienes pretendan cuidar su salud un poco más habrán de procurar alejar de sus mentes el miedo y procurarse actividades, lecturas y compañías con las que disfrutar.

Feliz Febrero

Dos pérdidas… dos formas de afrontarlo

Continuamente veo personas que viven situaciones de pérdida. Unas veces pierden su salud, otras ven perder la salud o la vida a sus propios familiares y amigos. Yo también las he vivido, y sigo viviéndolas en mi entorno.
Hasta aquí, nada de nuevo, sino el juego mismo de la vida. Ese juego que acaba siempre en despedida.
Pero el modo en el que vivimos dichas situaciones, marcará la radical diferencia entre estar feliz o sufrir inútilmente.

Una paciente que perdió a su hija adolescente en un accidente me dijo:

– Sufrí mucho por ello. Lo pasé muy mal. Pero poco a poco he aprendido que ese acontecimiento forma parte del ciclo de la vida. He logrado recordarla sin dolor; agradecer el tiempo que pasé con ella, y tengo la profunda convicción de que allá donde esté se encuentra feliz.

Otra paciente a la que se le murió, ya mayor, su hermano:
– La vida me dio un vuelco. Me siento mal desde entonces y, a pesar de los años transcurridos, no he logrado superarlo. Me rebelo frente a eso…no acepto que la vida sea así… no acepto que haya muerte…

Como dice el título, «dos pérdidas…dos maneras de afrontarlas».
El dolor de la pérdida no es evitable, pero el sufrimiento sí.

¿Con cuál de las dos posturas te identificas más?

¿De qué forma podemos estar preparados para cuando las pérdidas aparezcan en nuestra vida?

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Moldear la vida

Moldear la vida

moldear la vida“El barro siempre estuvo ahí, pero son las expertas manos del alfarero las que lo transforma en hermosas vasijas. Del mismo modo, la vida te da los materiales que habrás de moldear y sólo de ti depende la belleza o la utilidad de las obras que realices” (ANF)

No renuncies a ser el protagonista de tu vida

No renuncies a ser el protagonista de tu vida

tomar las riendas“Si un día descubres que tu eres quien maneja las riendas de tu propio destino, y que tienes el poder de dirigir tus pasos hacia las metas que te propongas, te habrás librado de la terrible maldición de sentirte una víctima indefensa, desconcertada, por los vaivenes de la vida en un mundo incierto”. (ANF)

Editorial de junio 2013

Editorial de junio 2013

junio1La mayoría de las personas con las que he hablado al respecto estaban ya deseosas de disfrutar de un poquito más de calor así como de los cielos azules y luminosos, tal como corresponde a esta época del año. Porque a decir verdad, mayo, se ha comportado de una forma más bien otoñal que no del suave modo al que nos tenía acostumbrado en años anterior. El calendario nos indica que en pocos días comenzaremos oficialmente el verano, tiempo propicio a la expansión, los viajes, el ocio y las vacaciones, sobre todo para quienes todavía tienen la fortuna de seguir trabajando, que espero y deseo que cada día sean más. El verano que pronto comenzaremos, se asocia desde tiempos ancestrales al elemento fuego, y se considera al sol como majestuoso representante en el firmamento de dicho elemento. Son la luz, el calor, la energía yang, la expansión, la energía ascendente, la alegría, la renovación o la purificación características que se atribuyen a este elemento. Además, el fuego, también purifica y desinfecta, elimina todo rastro de inmundicia y, simbólicamente, tiene la propiedad de quemar todas aquellas negatividades y toxinas que queremos soltar y dejar atrás. Es un elemento liberador y transformador, y en cierto modo imprescindible para realizar la alquimia interna que transforma el plomo denso y material en oro puro y espiritual. Un tiempo, pues, propicio para desprenderse de lo que sobra, para hacer limpieza externa e interna, para librarse de ataduras, de lastres innecesarios y para ofrecer a la llama de la hoguera, gozosamente y sin nostalgias, aquello de lo que deseamos desprendernos. ¿Qué sería lo más apropiado para quemar y purificar de nuestras vidas este nuevo solsticio de verano? El sol nos aporta múltiples beneficios, comenzando por ser esencial para el mantenimiento de la vida en el planeta. Sin él ninguna forma de vida existiría sobre la tierra, pero, al mismo tiempo, y esta es la otra cara de la moneda, si no tuviésemos la capa protectora de la atmosfera que filtra sus rayos, tampoco nada ni nadie sobreviviría a su radiación. Se cumple pues que, como en casi todas las cosas en la vida, es “la justa medida” lo que permite que todo se desarrolle del mejor modo posible. Como efectos no deseables, el sol también produce una mayor oxidación en los tejidos con un aumento de los radicales libres junio2frente a los cuales es necesario defenderse. Por tanto, para quienes lo toman con cierta frecuencia, no sólo necesitarán una protección cutánea adecuada, sino que también habrán de tener una buena hidratación, así como tomar suplementos apropiados de productos antioxidantes. En los últimos tiempos se ha podido constatar un aumento de la incidencia de procesos oncológicos en piel relacionados con el exceso de radiación solar, tales como los melanomas o los carcinomas basocelulares, entre otros. Para prevenir estos casos lo más apropiado es evitar la exposición solar excesiva, y si se hace, llevarlo a cabo utilizando las cremas protectoras con filtros solares, además de hacer las revisiones dermatológicas necesarias cuando encontramos lunares o manchas sospechosas. Afortunadamente, cada día se van conociendo nuevos tratamientos para estos tumores y recientemente, hace unos días, saltó a la prensa el descubrimiento  de una nueva familia de fármacos que se utilizan para tratar el melanoma, y que actúan estimulando el sistema inmunitario del huésped. Según lo publicado, dichos productos parecen estar consiguiendo muy buenos resultados, tanto en laboratorio como en humanos, habiendo sido constatados mediante los correspondientes ensayos clínicos. No obstante, todas estas noticias han de ser siempre recibidas no sólo con esperanza sino también al mismo tiempo con un cierto espíritu crítico, pues muchas veces los titulares de prensa, que ya sabemos que son tendentes al sensacionalismo, no corresponden con lo que luego se lee en la letra pequeña. Por otro lado, desde que la noticia sale publicada hasta que dicho descubrimiento llega directamente al usuario suele pasar a veces demasiado tiempo y, en ocasiones, ni siquiera  llega al público sino que se queda por el camino al no haber superado los requisitos legales o bien por encontrar alguna otra traba para su comercialización. Esperamos que podamos ver los frutos tanto de ésta como de otras noticias similares, beneficiando en el futuro a muchos enfermos. Lo comentado anteriormente me ha hecho recordar de nuevo algo que está en mente de casi todos y no siempre se dice, y es la importancia que tiene la investigación en general y la que se realiza en el campo de la salud en particular. Esto es algo de lo que hablaré en otro momento más extensamente porque creo que la situación actual en nuestro país es bastante lamentable. Pero, en este contexto que estoy exponiendo ahora, no sólo quiero referirme a la investigación puntera, la verdaderamente científica que se lleva a cabo en los laboratorios, sino también a otro tipo de investigación que, siendo más modesta, influye directamente en la vida de cada uno de nosotros, la investigación de nuestro propio mundo interior  que cada cual ha de llevar a cabo cuando se posee la firme determinación de mejorar la vida. Dicha investigación nos lleva al autoconocimiento y éste es uno de los ingredientes imprescindibles para una vida más feliz, que es de lo que se trata. Llamamos autoconocimiento al resultado de una minuciosa investigación y comprensión de quienes somos, de qué hacemos aquí y del modo en el que nos relacionamos con los demás y con el mundo. Nos lleva a tener la mente clara y a sentir, pensar y actuar de un modo congruente con nuestros principios. Y eso sólo puede hacerse cuando la luz de la consciencia, que metafóricamente se compara con el sol, alumbra nuestra vida. Por tanto, como moraleja apropiada para este mes de junio que comienza, podríamos decir que, al igual que a nivel macrocósmicojunio03 empezamos a experimentar el triunfo del sol en el firmamento, nos vendría bien aprovechar estas fechas para intentar, a nivel de nuestro propio microcosmos, que la luz de la consciencia triunfase, también, sobre las sombras de la ignorancia y el desconocimiento. Un buen momento, pues, para conocerse mejor al tiempo que podemos además disfrutar relacionándonos con los demás y con el mundo que nos rodea de un modo más positivo y alegre. Feliz Junio

Esforzarse por lo que vale la pena

Esforzarse por lo que vale la pena

esforzarse en lo positivo“Algunas personas, a base de muchas repeticiones, desarrollan una especial competencia en lograr destrezas que no desean. Por ejemplo, unos son especialmente hábiles para fabricar tristezas; otros consiguen ser expertos en vivir con resentimientos; también hay quienes son auténticos especialistas en fabricar culpabilidades o en desvalorizarse, etc. ¿Qué tal si orientásemos nuestros esfuerzos para llegar a ser suficientemente hábiles en alcanzar serenidad, felicidad y paz?” (ANF)

Cultivar el regocijo

regocijo “Somos felices cuando nos regocijamos en el día a día, y esto sucede si cambiamos la percepción, es decir, nuestro manera limitada de percibir el mundo, y también cuando nos esforzamos en que nuestros actos cotidianos sean beneficiosos para otros seres.” (ANF)

No dejes escapar hoy la alegría

No dejes escapar hoy la alegría

alegría“Cada día la felicidad busca compañía, y sale a visitar a quienes quieran acogerla en sus vidas, pero muchos, absortos en sus problemas, ni siquiera se dan cuenta que silenciosamente pasó a su lado. Así que hoy no te distraigas, abre los ojos y disponte a atraparla en cuanto sientas que se acerca” (ANF)

Ni ayer, ni mañana…

Ni ayer, ni mañana…

presente“Estamos llamados a descubrir todo el potencial de amor, de creatividad y de vida que brota en cada momento presente, porque no existimos ni en el ayer ni en el mañana, sólo en el ahora” (ANF)